El clásico juego de cartas que combina rapidez, observación y diversión para toda la familia. Los jugadores deben formar un cuarteto de cartas iguales y, al lograrlo, gritar "¡Chancho!" y colocar su mano en la mesa. El último en hacerlo recibe una prenda divertida, como imitar a un chancho o cantar. Ideal para desarrollar la atención y la agilidad mental en niños y adultos.